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Tener siempre presente que el dojo, más allá de un recinto de entrenamiento o competencia, es una Escuela moral y cultural.2
Saludar el dojo cuando se ingresa y cuando se abandona.3
Respetar escrupulosamente las reglas generales de cortesía y en particular las del Karate.4
Esforzarse en toda circunstancia por ayudar a los compañeros de entrenamiento evitándoles ser para ellos causa de incomodidad o malestar.5
Respetar los cinturones superiores y aceptar los consejos sin objeciones. Por su parte los cinturones superiores deben ocuparse del progreso técnico de los menos expertos.6
Cuando no se ejercita hay que mantener una actitud correcta y no permitirse actitudes o posiciones desaplicadas aun si se está fatigado.7
Permanecer en silencio. Si es necesario hablar, hacerlo respecto a la práctica y en voz baja.8
No abandonar el tatami sin autorización del Maestro, Instructor o quien lo reemplaza.9
Las uñas de las manos y pies deben mantenerse cortas. Durante el entrenamiento deben sacarse anillos, aros, cadenas y cualquier objeto que pueda causar accidentes a si mismo u otros estudiantes. Solo a las mujeres se les permite vestir una polera blanca bajo el karate gi.10
Respetar el horario de práctica de los cursos salvo autorizaciones particulares.11
Cuando el entrenamiento se termina o se observa sin practicar, seguir con atención su desarrollo y explicaciones.¡Recordar que el karate no se practica solo en el dojo!
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